Te ayudaré a que tu marca cuente su historia y ofrezca sus experiencias a todo el mundo
Pues sí, soy un brandsfreak o, como me llaman en mi entorno, «el pesao de las marcas».
En realidad, este término no existe. No importa que lo busques en el diccionario.
Ahora que ya tenemos un poco de confianza, te voy a contar una historia que siempre pongo de ejemplo.
Bueno, igual te cuento hasta dos…
A lo que iba.
Hay un fragmento en la película «El fundador» (2016) que es especialmente revelador. Tras firmar la adquisición de McDonald’s por 2,7 millones de dólares, Dick McDonald y Ray Kroc mantienen una conversación. En ella, Dick le pregunta que por qué no se limitó simplemente a robarles la idea e imitar su modelo de negocio. Entonces Ray le contesta que hubiera fracasado, porque lo que realmente hace único a McDonald’s no es su sistema, sino su nombre…
Teniendo en cuenta lo que es hoy en día McDonald’s… nos hace darnos cuenta de la importancia de la marca, más allá del producto o servicio.
Por cierto, si quieres escuchar el fragmento entero, puedes hacerlo en Brandchemist, mi podcast.
Venga, si has leído hasta aquí, te has ganado que te cuente mi segunda anécdota preferida.
Esta vez el protagonista de la historia soy yo. Y me sirve para ilustrar también la importancia de la gestión de la marca.
Hace ya unos años, le propuse a una clienta cambiar el nombre de su marca y hacer un nuevo branding. Así pasó de llamarse Único Inmobiliaria a Proxxima Inmobiliaria, realizando toda la gestión de registro de marca y demás trámites.
Esto no tendría más interés si no fuera porque, un tiempo después, la clienta me llamó preocupada para decirme que se había enterado de que ya existía un negocio llamado «Próxima Inmobiliaria», en una barriada de Sevilla. En el mismo momento la tranquilicé confirmándole que la marca era suya porque, en caso de que ya existiría otra similar registrada no nos la hubiera concedido.
Así que efectivamente ya existía una «Próxima Inmobiliaria» pero perdió su marca por no haberla gestionado correctamente… cometió el gran error de no registrarla.
Pero la cosa no queda aquí.
Tiempo más tarde, me llama un íntimo amigo para ir a tomar un café. Al llegar me sorprendo al verle acompañado de otra persona…
Esa persona no era otra que el dueño de la Próxima Inmobiliaria al que le robé la marca.
Y, cuando ya me preparaba para que me cayera una buena bronca, me dijo que, por razones obvias, necesitaba una nueva marca… y que había pensado que quién mejor para creársela que la persona que le había quitado la suya…
¡No me digas que no es una buena historia!
Y es que parezcan lo mismo, consultora de marca que asesor de marca, no lo son. El asesor por regla general ofrece un trato más cercano y personalizado a sus clientes.
Una consultora de marca es una empresa o profesional especializado en estrategias de branding y gestión de la identidad de una marca. Su principal objetivo es ayudar a las empresas a desarrollar una imagen de marca sólida y coherente, que conecte con su audiencia y genere una percepción positiva en el mercado. Una consultora de marca ofrece una amplia gama de servicios, que pueden incluir la investigación de mercado, el desarrollo de estrategias de posicionamiento, la creación de identidad visual, la definición de mensajes clave, la gestión de la reputación y la implementación de estrategias de marketing.
Un asesor de marca es un profesional especializado en el desarrollo y la gestión de la identidad de una marca. Realiza la orientación estratégica y el asesoramiento experto a las empresas para ayudarles a construir una imagen de marca sólida y coherente. Trabaja estrechamente con el cliente para comprender su visión, valores y objetivos comerciales, y desarrolla estrategias personalizadas para comunicar eficazmente esos elementos a su público objetivo. Esto puede incluir la creación de una identidad visual, la definición de mensajes clave y propuestas de valor únicas, el desarrollo de estrategias de posicionamiento en el mercado y la supervisión de la implementación de tácticas de marketing.